EL JOVENCITO FRANKONSTEIN

José Frankonstein o "Frankonsmencey", más conocido como Don Pepito Frankonstein, es un respetado periodista de la Universidad de la Gran Vida y está más o menos felizmente comprometido con la fóbica idea de la independencia espiritual y cual y tal, con la cual se muestra inaccesible a todo contacto físico (en realidad no la quiere).

Frankonstein se exaspera cada vez que alguien menciona el tema de su tio-abuelo, el famoso científico loco, hasta el punto de insistir en que su nombre sea pronunciado «Fronkonstin» ya que quiere olvidar todo su pasado Frankista.

Tras una conferencia, un abogado se acerca al docto periodista para comunicarle que ha heredado la hacienda de su tio-abuelo.

Tras llegar la democrática Frankonstein se encuentra con el GRAN dilema de como mantener la GRAN finca sin dar golpe ( o dando golpes si jase farta).

Contrata a unos amigotes de la infancia - muchos más Frankistas que él - para repartirse las tareas de la GRAN finca.

Los tres ayudan a Don Pepito a encontrar los diarios privados de su tio-abuelo e, inspirado por ellos, Frankonstein finalmente acepta su herencia y, para transformar la finca, acuerda contratar a un nuevo cerebro que lleve la atípica hacienda sin plantar nada y autoabastecerte sin repartir dividen-dos...y vencerás.

Desafortunadamente su ayuDante (Divina Comedia) se equivoca a la hora de elegir el cerebro pensante del que en el futuro será su sustituto, por lo que en vez de utilizar el de un famoso escritor-periodista han contratado a uno que tiene un cerebro quepaqué.

Este error se revela cuando "El Jovencito Paquito Frankonstein" se escapa del castillo armando un gran alboroto. Mientras vaga por el campo, el monstruo creado (cre...ido de la hoya) tiene sendos encuentros con la niña Ana y un ermitaño ciego que no quiere ver la realidad.

Mientras tanto, la gente del pueblo se prepara para un motín contra Frankonstein por no haber continuado los trabajos "democr-áticos" de su tio-abuelo.

Este motín está alentado en parte por el inspector jefe Santi-Aigor , que tiene un acento tan cerrado que ni sus propios paisanos pueden (ni quieren) entenderle y además posee un brazo izquierdo de madera "aticulado" y extremadamente chicha-rriante, resultado de su anterior enfrentamiento al Gran... monstruo de Frankonstein.

Tan pronto como la turba se acerca al castillo de Frankonstein, éste decide transferir algo (un mínimo) de su intelecto al monstruo que ha creado. Debido a esto, se vuelve totalmente incapaz de razonar y, de un salto ingente...lanza al abismo su cuerpo...¡¡¡Guañoth!!!...¡¡¡Guañoth!!!...¡¡¡Cachanchán!!!...¡¡¡Cachachán!!!...

¡¡¡ VACAGUARÉ !!!









EL JOVENCITO DON PAQUITO...FRANKONSTEIN



El Gran Viejito Frankonstein

ya tiene su fiel reflejo

Don Paquito "FRANKONSMENCEY"

"Jovencito" en el espejo