EL DÍA Y LA NOCHE DEL GRAN ENAMORADO

EL EXTRAÑO CASO DEL GRAN JOSEKILL Y EL PEQUEÑO PEPEHYDE

(La Noche y El Día)

Este es verdaderamente un clásico del periodismo universal. Esta célebre historia es un estupendo relato de misterio que oculta una alegoría moral. Se trata de una historia que contiene misterio, terror y ciencia ficción. El extraño caso del Gran Josekill y el periodista Pepehyde se inmortalizó como la historia del hombre y la bestia.

El Gran Josekyll: en su juventud, se dio cuenta de que la conciencia de cada ser humano se compone de dos aspectos - el bien y el mal - que están enzarzados en una lucha continua. Siguiendo la hipótesis de que es posible polarizar y separar estos dos componentes del yo, creó un "potaje" que podía transformar a una persona en la encarnación de su parte maléfica, consiguiendo al mismo tiempo depurar el lado bueno. Después de tomar el "potaje", Josekill disminuía un tanto su estatura, tomaba un aspecto desagradable para con todos sus semejantes, adquiría la fuerza y la astucia de doce hombres, su naturaleza malvada se volvía dominante, además su inteligencia se hacía extrañamente brillante y sus reflejos extraordinarios; a esta "persona" la llamó Pepehyde.

Después de unas cuantas transformaciones a Pepehyde, y viceversa, Josekill se acostumbró a realizar regularmente la metamorfosis con el fin de poder entregarse a placeres antisociales prohibidos, que nunca se permitiría en la persona de Josekill. Sin embargo, su parte maléfica se fue haciendo más y más fuerte, rebasando la capacidad de Josekill para controlarla. Después del asesinato-político de un parlamentario, Josekill, horrorizado, decidió dejar de tomar su "potaje".

Desgraciadamente para el gran Josekill, después de algún tiempo de tranquilidad, las trasformaciones a Pepehyde se producían espontáneamente, mejorando sus "facultades" y Josekill solo podía permanecer de esta forma mientras durasen los efectos, cada vez más debilitados, del "potaje". Finalmente se agotó un ingrediente fundamental del "potaje"; una sal que había adquirido inicialmente en la vecina y hermosa isla en gran cantidad. Las nuevas remesas de esta sal ya no producían un "potaje" efectivo. Al principio, Josekyll lo atribuyó a impurezas en estas remesas, pero finalmente llegó a la conclusión de que la impureza desconocida se hallaba en el lote inicial, siendo ésta la que otorgaba efectividad a la mezcla, por lo que nunca más podría obtener su "potaje", y quedaría convertido en su oscuro alter ego Pepehyde permanentemente.

El Gran Josekill -que suena casi como “José kill”, es decir, “José asesino” - mitad en español mitad en inglés- sería la cara del hombre y el periodista Pepe-Hyde -en inglés el verbo “to hide” significa “ocultar”- sería la bestia que se esconde detrás. "Todos los hombres del mundo son una mezcla del bien y del mal, y Pepehyde, solo, entre los hombres del mundo, era el puro mal".

Escindido en dos mitades, resultaba que una, la original, era el Gran Josekill, donde habitaba, como en todos los hombres del mundo, el bien y el mal; la otra mitad, llamada Pepehyde, era, en cambio, pura maldad. Y ante los remordimientos y la infelicidad de la mitad original, observamos como la mitad mala y homicida-política-geográfica, aquella que actúa según su voluntad sin escuchar a razones o convenciones, es plenamente –terriblemente- feliz. En el fondo, vendría a decirnos, todos deseamos liberar a nuestro Pepe Hyde.

Y la llave de las cadenas que sujetan al monstruo es un brebaje, "un potaje mágico" que el Gran Josekill ha inventado en su "laboratorio". Después de guisárselo y comérselo nos dice: "Mi demonio, que había estado encerrado durante un tiempo, salió rugiendo". Podemos ver en este atipico elixir una referencia a la importancia que tenían las drogas en aquella generación romántica; su consumo era usado como estimulante del sueño, de visiones terroríficas, y estaba en perfecta sintonía con una tendencia que reflejaba el ambiente de una época fascinada por la exploración del subconsciente a través del sueño.


Comentarios sobre el Gran Josekill:

"Siento una repugnancia muy grande hacia los procedimientos inquisitivos; me sugieren algo de lo que veremos el día del Juicio Final".


"Formular una pregunta equivale, muchas veces, a tirar una piedra. Suba usted a lo alto de una colina, tome una piedra y échela usted a rodar por la pendiente. La piedra arrastrará muchas otras y, sin que usted lo piense, el pobre diablo que cultiva lechugas en su huerta para pasar inofensivamente un día de asueto, sufrirá descalabros mortales y su viuda contraerá segundas nupcias".


"Mientras más extrañeza te causen los actos de tu prójimo, más cuidado debes poner en abstenerte de asomar los ojos por una rendija para sorprenderlo en su intimidad".

"Si es el mayor de los pecadores, es también la mayor de las víctimas".


"Este hombre no tiene nada de loco; nada, absolutamente. En cambio, su letra es de lo más extraño que he visto.


Citas atribuídas al GRAN JOSEKILL


"Debo seguir una senda tenebrosa. Pesa sobre mí un castigo que no me es dado describir, y corro un peligro del que no debo hablar. Reconozco que soy el más encenagado de los pecadores, pero soy también el más desdichado entre todos los que sufren. Jamás imaginé que esta tierra fuese morada de dolor y espanto como los que me han tocado en suerte".


"Quiéranme cuando menos lo merezca, porque será cuando más lo necesite" .


"EL GRAN POTAJE"

Atípico personaje
Antiguamente indecente
Cuando toma su brebaje:
"Un joven independiente"